Evidentemente para poder estudiar hay que saber leer. Pero esta lectura no es únicamente tomar un libro y reproducir oral o mentalmente las palabras que se encuentran en un libro, sino las habilidades con las que cuenta una persona para comprender un conocimiento por medio de la lectura, analizarlo, asimilarlo e interiorizarlo. Habilidades que son distintas en cada persona que lee y va a influir en él, de acuerdo a su nivel de comprensión, tiempo que emplea y capacidad para tomar lo que le es importante.

Específicamente, cuando se prepara una oposición, el lector debe tener un excelente dominio de la lectura, fluidez para leer y sobre todo concentración para retener la información, esto va a influir directamente en un buen estudio.

Estrategias de lectura

El lector que se enfrenta a una oposición debe tener unas características particulares que le garantizarán el éxito de su estudio. Algunas de estas características son:

  • Recurre a diferentes velocidades de lectura de acuerdo al nivel de dificultad del texto
  • Mantiene la concentración durante la lectura del texto
  • Evita la subvocalización
  • Utiliza movimientos de los ojos de manera eficiente para evitar recorridos defectuosos que retrasan la lectura.

La lectura rápida

Los expertos indican que leer lentamente un tema de estudio, permite que el cerebro tenga tiempo para tener otros pensamientos y desviar la atención hacia otros pensamientos. Mientras que leer rápidamente mejora la concentración y centra la atención en una tarea específica, que en este caso es el estudio que se está realizando.

La comprensión de lo que se lee también mejora con la lectura rápida. Investigaciones han demostrado que un adulto lee como promedio 200 a 300 palabras por minuto y que si se aumenta esta cantidad, es porque se tiene la capacidad de entender rápidamente frases completas en lugar de detenerse en palabras específicas. Esta habilidad está relacionada con el buen manejo del vocabulario y por las experiencias y hábitos de lectura.

Existen varias técnicas que permiten mejorar la lectura rápida y afrontar con éxito los temas de oposición. Una de ellas es entrenar la velocidad de lectura. Para desarrollar esta técnica, realizamos lo siguiente:

Estrategias de lectura

  • Seleccionar un libro y apunta en una libreta los avances obtenidos
  • Comenzar a leer el libro durante 10 minutos, con una velocidad normal (comprendiendo lo que se está leyendo. Anotar hasta que párrafo y palabra se llegó.
  • Repetir la lectura del mismo texto y tratar de hacer el mismo recorrido en 7 minutos. Anotar el avance
  • Repetir la lectura del mismo texto y tratar de hacer el mismo recorrido en 6 minutos. Anotar el avance
  • Repetir la lectura del mismo texto y tratar de hacer el mismo recorrido en 5 minutos. Anotar el avance
  • Repetir la lectura del mismo texto y tratar de hacer el mismo recorrido en 4 minutos. Anotar el avance

Este es un proceso de “calentamiento” y se recomienda utilizar un libro con el que se esté familiarizado.

Mejorar la comprensión

Esta técnica ayuda a entender mejor lo que se está leyendo, además de no perder mucho tiempo haciéndolo. Algunos consejos son:

  • Determinar la finalidad de la lectura. Escribiendo algunas preguntas sobre lo que se quiere aprender. Ayuda mucho revisar el temario.
  • Leer rápidamente el contenido, su extensión, sus esquemas o gráficos, etc.
  • Leer el contenido unas tres o cinco veces más rápido de lo normal
  • Realizar una lectura comprensiva
  • Realizar mapas mentales o esquemas, resúmenes para organizar la información

Estas estrategias y muchas otras son útiles y adaptables a cada persona, de acuerdo a sus estilos de aprendizaje y motivación.